Posted on 1 Comment

Top 5: las mejores explosiones de la historia del cine

Esta semana una popular serie de televisión sobre terrorismo en los EEUU… vale, sí, es Homeland. Bien, pues esta semana, en su final de temporada, la serie mostraba una explosión que apestaba a píxeles y efectos de TV movie. Esto me llevó a reflexionar sobre como debía ser una explosión y por ende, cuáles eran las mejores que había visto.

Como cualquier ranking de estas cosas el resultado no responde a hechos objetivos, sino al caprichoso gusto del autor, en este caso, un servidor. Así pues, esta entrada del blog bien podría llamarse “mis explosiones favoritas”. Avisados estáis.

5. Apocalypse Now: Bombardeo con napalm

Algunas fuentes hablan de 4500 litros de gasolina, otras de 6000. Sea como fuere, el ataque de la caballería aérea del Coronel Kilgore será recordado por la que entonces fue la mayor explosión jamás filmada en cine. Y por supuesto, el consiguiente “I love the smell of napalm in the morning“. Y la veintena de helicópteros del ejército filipino al servicio de Coppola. Y el infarto de Martin Sheen. Y el huracán Olga destruyendo el set. Y el presupuesto triplicado. Y la producción alargándose hasta los cuatro años. Y…

Y es que ya lo dijo Coppola en Cannes el día de su estreno: “No es una película. No trata de Vietnam. Es Vietnam.

 

4. Mentiras arriesgadas: fuego sobre el agua

Schwarzenegger merecería su propio ranking. Commando, El último gran héroe, Terminator 2,  Depredador… Explosiones para aburrir. Me quedo con la firma que James Cameron en la comedia romántica más cara de la historia.

El fuego arde sobre el agua.
Al fondo, los restos de la explosión.

Lamentablemente, no hay vídeo. Pero esto es lo que sucede: lanzallamas en mano, Arnold quema todo cuanto se le pone por delante. Al terrorista de la Yihad Carmesí se le hinchan las gónadas y dispara un cohete al deposito de gasolina del que se alimenta el susodicho lanzallamas. Schwarzie lo arroja al suelo, corre y se tira de cabeza al mar en el preciso instante en que todo vuela por los aires. Entra al agua con el fuego quemándole los pies (en una perfecta cámara lenta) y mientras bucea la gasolina en llamas brilla sobre su cabeza. Maravilloso.

 

3. Jaws: la criatura en mil pedazos

No es la explosión más espectacular pero pocas han generado tanto alivio en el espectador. El primer taquillazo de  Spielberg culminaba en un memorable “Smile, you son of a bitch!

Litros de sangre mezclados en agua mientras pedazos de escualo llueven del cielo resultan lo suficientemente convincentes. El peligro ha terminado. Brody wins.

 

2. The Matrix: helicóptero contra edificios de goma

El tramo final de la película es un crescendo constante capaz de reinventarse tres veces: tiroteo en el lobby – rescate en helicóptero – combate en el metro. La escena la habéis visto mil veces, pero el making of os puede dar una buena idea de lo que estamos hablando.

Sí amigos, cuando los Wachowski molaban. Algún día vuelven hacer algo bueno. Seguro. Cloud Atlas no será ese día.

 

1. Mission: Impossible: un inocente chicle

No hay fuego. Tampoco humo. Sólo una onda expansiva destruyendo un par de peceras, pero la escena es de una elegancia y un ritmo  sublimes. La edición de sonido una maravilla. Un trabajo a la altura de genios como De Palma.

La película nos brinda una segunda explosión pero aunque los efectos de Industrial Light and Magic son una pasada, hasta la Mona Lisa envejece y al helicóptero en el túnel le canta un poco el CGI.

Ya puestos, os dejo también este descubrimiento reciente. Una detonación en una mina. No es cine. Pero mola.

Posted on Leave a comment

Tropic Thunder: Una guerra muy perra

Todo el mundo sabe lo que esperar cuando va a ver una película protagonizada por Ben Stiller. Pero, si además la dirige y escribe, ¿qué puede salir del también actor, director y guionista de Zoolander ? La respuesta es Tropic Thunder: Una guerra muy perra (¿a quién se le ocurrirán subtítulos tan poco atractivos?). Tropic Thunder trata sobre las peripecias de un grupo de actores que se ven inmersos en un conflicto armado mientras ruedan una película bélica… Con el toque de Ben Stiller, por supuesto.

Tropic Thunter: Una guerra muy perra

El trailer prometía y la película cumple bastante, sobre todo en ciertos aspectos. Si unos es consciente de lo que va a ver Tropic Thunder roza el notable. Los efectos especiales y ciertos planos aéreos son dignos de películas como Salvar al soldado Ryan o Apocalypse Now, a la que rinden homenaje. Tampoco se quedan cortos los efectos de sonido, la selección de la banda sonora y las interpretaciones de todos los actores (mención especial a la caracterización y papel de Tom Cruise). El único que no convence demasiado es Jack Black, cuyo papel se ha visto ya demasiado.

En cuanto al guión, la idea es interesante y bastante entretenida aunque la duración se presenta como principal inconveniente. Y es que últimamente las películas de humor (sobre todo las más absurdas como Casi 300 ) no pasaban de 80 minutos y Tropic Thunder dura casi dos horas, más de lo que cualquiera se espera. Algún tijeretazo en el metraje no hubiera venido mal.

Pero no todo son chistes fáciles. Ben Stiller se despacha a gusto burlándose del sistema de producción de las grandes películas americanas. Son muy interesantes ciertas reflexiones que se hacen, como las referentes a los Óscars a papeles de casi-retrasados como Forrest Gump (Tom Hanks), Rain Man (Dustin Hoffman) o Yo soy Sam (Sean Penn), que a pesar de su tono irónico son certeras cual Barret M95.

Otra cosa que llama la atención son los falsos trailers que aparecen al principio, que tienen como protagonistas a los actores fiticios que aparecen en Tropic Thunder, y muy en la línea de Machete, que apareció en Planet Terror (el segmento Grindhouse de Robert Rodríguez). Seguro que darán más de una idea a quienes se vayan a presentar al concurso de trailers Teaserland. Aquí tenéis Satan’s Alley (con Robert Downey Jr y “el ganador de un Premio MTV al mejor beso”, Tobey Maguire) y Scorcher VI.

A modo de conclusión, Tropic Thunder es un película recomendable que mezcla humor absurdo (véanse los pedos de Mr. Black o el nombre de algunos personajes como Alpa Chino) pero que pone entre la espada y la pared el sistema de producción de películas de Hollywood. Resulta irónico que el propio film responda al star-system que tanto critica, pero esa es otra historia…